La nueva alfombra roja: festivales a prueba de Covid

Después de varios meses de inactividad, la industria audiovisual reabre sus puertas con la llegada de los festivales internacionales de cine, como los de Venecia o San Sebastián, y el estreno de películas aplazadas por la pandemia.

Por: Marina de Paz Martín

La crisis del coronavirus ha tenido graves efectos a nivel mundial. El sector cultural, y en concreto el mundo del cine, se han visto obligados – como todos los demás – a parar durante un tiempo: rodajes suspendidos, prestrenos aplazados, galas canceladas,... Cuando parece que la situación mejora por momentos, la industria cinematográfica ha ido retomando paulatinamente su funcionamiento de cara a la reactivación del sector. Y con ello, una nueva temporada de festivales y alfombras rojas ha vuelto a reunir a actores, directores y demás profesionales de este ámbito. Aunque, eso sí, con las medidas de seguridad pertinentes. La alfombra roja se ve ahora de otra forma, con mascarillas de por medio, pero con el mismo prestigio y elegancia de siempre.

Nuevas perspectivas. El rápido avance de la pandemia supuso la cancelación de actos como el Festival de Cine de Cannes, que se celebrará en un formato más breve a finales de octubre, o el estreno de nuevas películas, como la última entrega de James Bond, No time to die, prevista inicialmente para el mes de abril y que finalmente tendrá que esperar hasta 2021. Sin duda alguna, los meses de confinamiento han demostrado que la cultura es un bien fundamental, y que el cine, en particular, es un arte más allá del entretenimiento que nos hace conectar unos con otros. Desde el Ministerio de Cultura, en colaboración con el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), se ha elaborado la campaña El cine es un lugar seguro, que anima a los espectadores a acudir a las salas de cine, acondicionadas con las medidas higiénico-sanitarias necesarias para convertir estos espacios en lugares seguros para los usuarios.

No obstante, el sector audiovisual ha buscado otros caminos ante el impedimento y la dificultad de estrenar nuevas obras en las salas de cine. Esto ha impulsado una estrategia que, si bien ya se estaba llevando a cabo meses atrás, la pandemia no ha hecho más que darle el empujón definitivo. Y que no es otra que el estreno directo a través de plataformas de vídeo. La última en sumarse a ello ha sido Disney +, que pasó de anunciar el estreno presencial en salas de cine de Mulán, su último remake live-action, a hacerlo en exclusiva en su nueva plataforma online.

Esta ‘nueva normalidad’ a la que nos enfrentamos ha cambiado nuestra vida en muchos sentidos, obligándonos a adaptarnos a un nuevo entorno. Pero mientras la situación continúe así, es necesario reinventarse y encontrar nuevos canales de comunicación. Esto es precisamente lo que ha sucedido con la última entrega de los premios Emmys en su 72ª edición. Lejos de suspender su ceremonia, los premios de la televisión estadounidense se han celebrado a distancia, con más de 100 conexiones con los nominados desde sus hogares y la entrega de galardones a domicilio. En una gala conducida por el presentador Jimmy Kimmel desde un vacío Staples Center, las referencias a la pandemia han sido constantes, así como los momentos reivindicativos. Las celebrities pudieron disfrutar desde su sofá, aunque muchas como Zendaya, flamante e histórica ganadora a Mejor Actriz de Drama por Euphoria, optaron por dejar el pijama a un lado y enfundarse su vestido de gala. Una ceremonia diferente, pero que ni el coronavirus ha podido dejar atrás.

Festivales libres de Covid. Aunque en lo que a cine y alfombras rojas se refiere, no todo está transcurriendo en el entorno online. En Europa, se está optando por el formato tradicional, incluyendo protocolos sanitarios para el bienestar de sus asistentes (mascarillas, reducciones de aforo o desinfección de espacios), como en el caso de los festivales de cine de Venecia o San Sebastián.

En esta situación extraordinaria, el festival italiano ha abierto sus puertas, convirtiéndose en el primero en hacerlo después de la irrupción del coronavirus. Aunque con estrictos protocolos y medidas de seguridad e higiene, la alfombra roja se ha vuelto a desplegar para que personalidades de la talla de Cate Blanchet, en calidad de Presidenta del Jurado de esta edición, Willem Dafoe, Helen Mirren, Vanessa Kirby, Nathalie Emmanuel o la española Ester Expósito, acudan al certamen. El festival, que este año ha optado por celebrarse sin público en la alfombra roja, ha acogido 18 películas en competición oficial. Si bien es un número de obras inferior al de años anteriores, sobre todo teniendo en cuenta la ausencia de producciones hollywoodienses, acoge propuestas de todo tipo y, además, con gran presencia de autoras femeninas. En cuanto a los premiados, Nomadland, el film de la directora Chloé Zhao y protagonizado por Frances McDormand, se llevó el León de Oro, mientras que el Gran Premio del Jurado fue para Nuevo Orden, la cinta del mexicano Michel Franco. Otro de los estrenos destacados ha sido el cortometraje de Pedro Almodóvar, The human voice, su primera obra filmada en inglés que protagoniza la actriz Tilda Swinton.

Unos días más tarde, San Sebastián recogió el testigo de Venecia para dar paso a su festival de cine, en el que también se llevó a cabo la implantación de estas medidas para la seguridad de todos los allí presentes, con el uso de mascarillas obligatorias y reducción tanto de aforos en las salas como del número de proyecciones. Unas semanas antes, también en España, se había celebrado el Festival de Cine de Málaga en su edición número 63, que sirvió de ‘ensayo’ para lo que vendría en los días posteriores. La ciudad donostiarra se vestía de gala una vez más para acoger el certamen, que este año ha estado marcado por ausencias de última hora - derivadas de los efectos del Covid -, la presencia de algunos rostros internacionales, como el de Johnny Depp en calidad de productor de un documental, y por novedades como la presentación de series, en las que destacan la adaptación realizada por HBO de la novela de Fernando Aramburu, Patria, o la nueva producción de Movistar, Antidisturbios.

Uno de los platos fuertes ha sido la presentación de Rifkin’s Festival, la última obra de Woody Allen producida en España y que está ambientada, precisamente, en la ciudad vasca durante la celebración de este evento. Aunque el cineasta no pudo estar presencialmente en el festival – las actrices Elena Anaya y Gina Gershon fueron las representantes y encargadas de presentar el filme –, sí lo hizo a través de videollamada, donde se lamentó de la situación actual y comentó cómo había sido el rodaje de la cinta. Viggo Mortensen, otros de los rostros más internacionales que han pisado esta edición, lo hizo para recoger el Premio Donostia de este año y presentar Falling, su primera obra como director que, además, protagoniza él mismo. La Concha de Oro, además de los galardones a Mejor Dirección, Actriz y Guion, fueron para la película dramática Beginning, la gran triunfadora. San Sebastián despide así su edición más atípica donde, pese a las restricciones por la situación de la pandemia, se ha podido disfrutar de una semana de cine a lo grande, con apuestas nacionales e internacionales.

Ahora podemos decir que el cine está de celebración, pues tras un largo parón obligado, la maquinaria audiovisual se pone en marcha de nuevo. Aunque todavía falta un largo camino por recorrer y las pérdidas que se pronostican en la industria son considerables, siempre supone una alegría ver que las pantallas de cine vuelven a coparse de nuevas obras.