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Audiencias: el caso “arrastre” de los programas de televisión

  • Pablo del Campo Sáez
  • 17 oct 2020
  • 3 Min. de lectura

Muchos programas consiguen levantar sus audiencias, e incluso anotar máximos, gracias al arrastre de espectadores que les dejan las emisiones de programas previos.


Por: Pablo del Campo Sáez


Durante estas últimas semanas estamos viendo el ejemplo perfecto del conocido como “arrastre” de audiencias que dejan determinados programas. Lo estamos comprobando con el concurso ‘Pasapalabra’ que, gracias a su prueba final, está llevando a máximos a la segunda edición de las noticias de Antena 3. Sin menospreciar el mérito del equipo de Vicente Vallés, su espacio de noticias no habría logrado superar a su principal competidor, Pedro Piqueras, sin la llegada del famoso concurso. Las tornas han cambiado y la batuta del liderazgo en la información reside durante los últimos meses en Antena 3. Vamos a analizar las claves de este hecho histórico en lo que a audiencias respecta. Cabe recordar que el informativo de Pedro Piqueras llevaba casi diez años liderando frente a los informativos de otras cadenas como Antena 3 o la pública.


El detonante de este terremoto en audiencias para Telecinco reside en la marcha de ‘Pasapalabra’ en octubre de 2019. Tras la desaparición del concurso, el espacio de noticias de Antena 3 se acercó al informativo de Piqueras, aunque la distancia todavía era notable. El principal perjudicado durante los primeros meses fue Telecinco ya que sus informativos decayeron en audiencia a pesar de mantenerse como líderes indiscutibles. Aquí observamos el primer efecto de “arrastre” de ‘Pasapalabra’. La prueba del rosco permite que se concentren numerosos espectadores frente al televisor durante los últimos minutos del programa que, además, se alargaba cinco minutos más ya que los informativos de Piqueras comenzaban a las 21:05. Durante estos minutos, Telecinco se aseguraba el liderazgo en sus espacios de noticias ya que los espectadores querían disfrutar del rosco y, a la hora de informarse, un espectador prefiere ver un informativo completo que uno ya empezado como sería en este caso las noticias de Antena 3 o el telediario de La 1.


Con la compra de ‘Pasapalabra’ por parte del grupo Atresmedia y tras su ubicación en parrilla, idéntica a su etapa en Telecinco, Antena 3 se aseguraba el liderazgo de una franja que tardo en llegar. Durante las primeras semanas, ‘Sálvame Tomate’ conseguía liderar por encima del concurso de Roberto Leal. Sin embargo, conforme el bote se hacía más grande y el programa de Telecinco perdía «bombazos» y temas que tratar al ser época estival, ‘Pasapalabra’ consiguió liderar y, por tanto, aupar al éxito a Vicente Vallés y su equipo. En esta ocasión observamos la segunda característica de este tipo de programas. Un concurso puede empezar flaqueando en audiencias, pero según su premio se va haciendo más grande, el formato consigue reunir a más espectadores. Lo mismo sucedió con ‘Boom’, un programa que comenzó a la sombra del concurso de Christian Gálvez, pero que en su final con Los lobos consiguió convertirse en la “final” más seguida de un concurso en la televisión en España. Lo contrario sucede con ‘Sálvame’. Es un espacio de cinco horas diarias que logra atrapar a la audiencia, aunque para ello necesitan temas potentes que funcionen. Esto quiere decir que su audiencia depende mayoritariamente de los temas, una variable bastante inestable. De ahí que, con el inicio de la temporada y la vuelta de los colaboradores más míticos del formato, el reciente liderazgo de ‘Pasapalabra’ pueda tambalearse. Habrá que esperar para ver lo que el programa vespertino de Telecinco tiene preparado y la respuesta de la audiencia. También tendremos que estar pendientes del crecimiento del bote en ‘Pasapalabra’.




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