La construcción de un campo de golf hace peligrar un paraje natural en la Costa del Sol

Los ecologistas luchan por conservar uno de los últimos reductos sin urbanizar del litoral malagueño

Por: Paula Martínez Moreu

La provincia de Málaga es una de las más visitadas por los turistas —en 2019 más de un 5% de los viajeros del territorio nacional visitaron la provincia, según datos de encuestas de ocupación hotelera del INE— y en este panorama cobran una especial importancia los atractivos de la Costa del Sol. Los municipios de la comarca suman unos 150 kilómetros de playa a los que llegan miles de turistas al año, no solo para disfrutar de la temperatura y las costas de la provincia, sino también para descubrir su riqueza cultural, gastronómica y paisajística.

Un ejemplo de este patrimonio natural se puede encontrar en los acantilados de Maro-Cerro Gordo, un paraje natural que abarca los municipios de Almuñecar (Granada) y Nerja (Málaga). Precisamente en la localidad de Maro (perteneciente al municipio malagueño) implicaría una recalificación de los terrenos, ya que actualmente no son urbanizables ño de Nerja) se está llevando a cabo un proyecto de construcción de un campo de golf y un complejo hotelero junto a los acantilados anteriormente mencionados.

El proyecto de construcción del campo de golf de 18 hoyos — que sería diseñado por el prestigioso Cabell B. Robinson, responsable de una gran cantidad de campos en el sur de Europa y norte de África—, residencias y zonas recreativas implicaría una recalificación de los terrenos, ya que actualmente no son urbanizables. Hoy en día, la zona tiene una gran actividad agrícola y es de los pocos tramos de la Costa del Sol que todavía no cuenta con grandes construcciones, pero esto podría cambiar.

El proyecto ya había sido presentado en 2015 (cuando el Ayuntamiento de Nerja era gobernado por un tripartito formado por PSOE, Podemos e Izquierda Unida), pero este fue rechazado. Sin embargo, a comienzos de abril (en pleno Estado de Alarma) la Junta de Andalucía modificó 27 leyes a través de un solo decreto ley. Debido a este cambio en la legislación, se facilita la tramitación de planes urbanísticos, lo que ha favorecido que este proyecto salga a la luz.

El promotor de este complejo y propietario de buena parte de los terrenos es Sociedad Azucarera Larios S.L, que en la primera década de los 2000 cedió parte de sus terrenos al Ayuntamiento de Nerja para equipamiento público. Por ello, la actual Junta de Gobierno (PP) y el grupo empresarial acordaron un convenio por el que la promotora abonará al Ayuntamiento 1,2 millones de euros y cederá algunos de sus terrenos para equipamiento público (como informó El País).

Distintos grupos ecologistas, como la plataforma ciudadana Otro Maro y Nerja es posible o GENA-Ecologistas en Acción han presentado diversas alegaciones contra este plan urbanístico por el impacto medioambiental que supondría la construcción, y en la plataforma Change.org se ha iniciado una petición contra la construcción del campo de golf.

Asimismo, se ha destacado que esta intervención puede hacer perder fuerza a la candidatura de las Cuevas de Nerja como Patrimonio de la Humanidad, ya que como se explica desde elDiario.es, “la UNESCO valora la gestión sostenible del entorno de los bienes candidatos a integrar la lista del patrimonio de la humanidad”.

Otros lugares amenazados en la Costa del Sol

Embalse de cancelada (o del Taraje)

Este embalse situado en el municipio de Estepona tiene una gran importancia no solo por la flora que alberga, sino que también acoge a multitud de especies de aves durante su migración. Sin embargo, este humedal no cuenta con una protección ambiental.

Río Chíllar

El río, perteneceinte al Parque Natural de Tejeda y Almijara, es visitado en verano por miles de senderistas que buscan un paraje refrescante. Sin embargo, si no se regula la afluencia de turistas y se aumenta la vigilancia, las consecuencias serán irreparables.